Rusia ha puesto fin a su presencia en el puesto de control fronterizo de Agarak, en la frontera entre Armenia e Irán, después de 30 años de patrullaje. La retirada, anunciada por el Instituto para el Estudio de la Guerra y confirmada por el primer ministro armenio Nikol Pashinyan, se produjo según un acuerdo alcanzado entre Pashinyan y el presidente ruso Vladimir Putin en octubre de 2024.
Desde el 1 de enero de 2025, las fuerzas fronterizas de Armenia han asumido plenamente el control de este paso estratégico. Este cambio sigue a la retirada de los guardias rusos del Aeropuerto Internacional Zvartnots de Ereván en julio de 2024, otro paso hacia la autonomía en la gestión de la seguridad nacional de Armenia.